domingo, 2 de diciembre de 2012

Romance anónimo

LA NIÑA ADORMECIDA

      (Ilustración de Alba)



















La mañana de San Juan
tres horas antes del día,
salime yo a pasear
por una huerta florida.

En medio de aquella huerta                   
un alto ciprés había,
el tronco tenía de oro,
las ramas de plata fina.

A la sombra del ciprés
vide sentada a una niña,
mata de pelo tiene
que todo el prado cubría,

con peine de oro en la mano
lo peinaba y lo tejía,
luego que lo hubo peinado
la niña se adormecía.

Ha bajado un ruiseñor
con alegre cantoría
y posado se ha en su pecho
de la niña adormecida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario