A las siete me levanté de la cama y fui al baño. ANTE el espejo me lavé los dientes.
BAJO el lavabo había un sapo y fui a por los guantes. CON éstos puestos lo cogí y lo puse CONTRA el espejo.
DE día lo dejé en la calle. DESDE ahí lo observé. DURANTE un rato esperé.
EN casa me llamaron por teléfono, a las diez. ENTRE la ventana y el móvil había tres pasos. HACIA las diez y diez acabé. HASTA entonces no me percaté de que el sapo había desaparecido.
MEDIANTE unos contactos lo encontramos. PARA dar con él tuve que ir a las afueras del pueblo. POR ahí no me orientaba bien así que llamé a mi amigo. SEGÚN él, lo había visto en una charca. SIN embargo, al llegar a nuestro destino no estaba. SOBRE una roca había huellas de sapo y las seguimos. TRAS andar diez pasos llegamos a un río y vimos a nuestro sapo, al lado estaba una sapa.
MEDIANTE unos contactos lo encontramos. PARA dar con él tuve que ir a las afueras del pueblo. POR ahí no me orientaba bien así que llamé a mi amigo. SEGÚN él, lo había visto en una charca. SIN embargo, al llegar a nuestro destino no estaba. SOBRE una roca había huellas de sapo y las seguimos. TRAS andar diez pasos llegamos a un río y vimos a nuestro sapo, al lado estaba una sapa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario