En las torres de la catedral.

El lunes día 17, con mi clase nos fuimos a las torres de la catedral, en la parte antigua de la ciudad. Es la primera excursión del curso; es la primera vez que la visitamos.

Tuvimos que coger el autobús urbano. El viaje fue un poco movidito, tuve que ir de pie todo el rato. 

Cuando llegamos a la catedral llovía bastante. 

Nos estaba esperando nuestra guía. Se llamaba Josefa, según una etiqueta que llevaba puesta. Era majíiiiisima con nosotros. La visita no sólo es interior es también exterior, por las terrazas. Hemos subido hasta la primera sala, la de la Mazmorra. El recorrido sigue por la Estancia del Carcelero, la Sala del Alcaide, la Sala de la Torre Mocha, la Sala Alta, la Sala de la Bóveda, la terraza de la Torre Mocha, la pasarela hacia la Torre del Gallo, el Trifolio interior de la Catedral Nueva y la terraza norte. 

La Catedral Vieja fue fundada por el obispo don Jerónimo, según los documentos existentes, hacia 1102 y 1120. Por eso la exposición que visitamos se llama "Ieronimus".  Desde la primera sala, se ve el retablo de la Catedral Vieja, obra maestra del Gótico, realizado entre 1434 y 1445 por un pintor florentino. Las escenas están organizadas en cinco pisos y once calles (en el inferior está la Virgen de la Vega, patrona de Salamanca). Se va contando la vida de la Virgen desde su nacimiento, la Natividad, Adoración de los Reyes, Jesús en la vida pública, el Bautismo de san Juan, las Bodas de Caná,...escenas de milagros, la Última Cena, la Crucifixión, la Resurrección, la Ascensión, ... por último la Coronación de la Virgen. El Retablo está coronado por una pintura sobre el Juicio Final.

   

Nos explicó cuales eran las partes de la catedral vieja y de la nueva, con dibujos.  

La Catedral Vieja tiene tres naves. La Torre del Gallo tiene influencia bizantina como la de la catedral de Zamora y la Colegiata de Toro.  La ciudad fue creciendo y hubo que pensar en ampliar la catedral Vieja, que fuera de mayores dimensiones, en consonancia con la importancia de Salamanca. Así es como sobre uno de los muros de la Vieja se fue construyendo la Nueva, más amplia y luminosa. Tardó muchísimo tiempo en terminarse.

   

En una de las salas pudimos ver (un video sobre la pared con el sonido) cómo se agrietaron las paredes por el terremoto de Lisboa (el 1 de noviembre de 1755). Afectó principalmente a la cúpula y al campanario.

Otra de las salas está dedicada a la música. Se exponen partituras e instrumentos antiguos, entre otros ¡una trompeta marina! Nos enseñó la antigua maquinaria del reloj.

Salimos a las terrazas bajo la lluvia. Miramos las espectaculares vistas hacia el norte y hacia el sur.

     

Hay muchos términos que nos ha explicado: cúpula, cimborrio, arbotante, gárgolas, contrafuertes, pináculos,...

Por último, lo más emocionante: subimos hasta el campanario por una escalera de caracol (¡cuántas escaleras había!) y tocaron las campanas. Dieron la una menos cuarto, hora de marchar a coger el autobús camino del colegio.

   

                                    ¡TOLÓN-TALÁN, TOLÓN-TALÁN, TOLÓN-TALÁN!
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Recomendación: ¡Tienes que ir! ¡Nos lo hemos pasado FE-NO-ME-NAL! ¡Genial!
Gracias a los escritos de Álex M., Pablo M., Álvaro C., Marta D., Jorge D. y Amaya L.